lunes, 2 de noviembre de 2015

'El general Ople y lady Camper', de George Meredith


George Meredith (1828-1909), el autor de la excelente novela El egoísta, es un autor victoriano que merece ser recordado y muy tenido en cuenta. Dejo aquí constancia de mi promesa de volver a él lo antes posible...

El general Ople y lady Camper es una de sus novelas cortas y de las más amables de su producción en temática y tono. Nos trasladaremos en ella a una pequeña localidad de la campiña inglesa- ya veis que por esta bitácora literaria se frecuenta mucho- con el general Ople, que se ha mudado junto a su joven y bella hija, Elizabeth, a un casita- "una morada señorial", como él mismo la defina- tras su retiro de la vida activa. Y junto al bueno del general Ople se mudan su declarada consideración a las apariencias y normas sociales, su esnobismo, su veneración por la clase aristocrática y sus ademanes caballerosos.
"Una excursión más allá de los alrededores inmediatos de Londres, proyectada mucho antes de alquilar a tal efecto su coche tirado por un poni, de hecho, desde su retiro del servicio activo, condujo al general Ople, a través de un famoso paseo que lo enamoró en el acto, hasta una elegante carretera que bordeaba un parque y que en seguida le hizo cambiar de pasión; y desde allí, poco a poco, hasta un lugar situado a un tiro de piedra de la orilla del río, donde no solo tomó la decisión de invertir sus afectos, sino también la de establecerse de por vida." 
Se siente, además de muy a gusto en su nueva residencia, particularmente encantado al enterarse de que su vecina es, ni más ni menos, lady Camper, aristócrata a la que anhela conocer cuanto antes. El arreglo de su persona, su porte caballeroso, sus cuidados y estudiados ademanes, su galantería,... todo se desmorona en presencia de la excéntrica lady Camper ante la que se muestra dubitativo y balbuceante. 

En los encuentros y desencuentros entre ellos- alguno con el tema de la relación amorosa de la hija de él con el sobrino de ella-, se produce no solo una batalla cuerpo a cuerpo de dos sexos, de dos géneros, de un hombre y una mujer, sino una lucha de clases y de roles, en los que la independencia de la mujer, la reivindicación de sus derechos, la crítica a las hipocresías y convencionalismos victorianos serán el telón de fondo. Y todo ello disfrazado y envuelto muy acertadamente de una comicidad que aligera el tono.  

¿Pretendiente o pretendido? El mundo al revés para Ople, que queda descolocado, desconcertado y a merced de lady Camper, inteligente y que sabe lo que quiere. Y lo que quiere es sin duda, llevar las riendas de su vida y de su relación con el mundo alejada de típicos tópicos.
 
La bonita edición de Ardicia, además del placer de la lectura de esta entretenida historia- inédita en castellano hasta ahora- nos ofrece un interesante postfacio de Virginia Woolf.   
 
 "Lady Camper es un enigma fuera de lo común- observó el general Ople a su hija."